Ahora que has tenido un acercamiento a las acciones que favorecen o afectan el proceso de aprendizaje, queremos explicarte detalladamente en qué consiste cada una de ellas para que, con determinación, elijas lo que consideres apropiado para el camino que comienzas aquí, en la Universidad.


Acciones que favorecen el proceso de aprendizaje:


Las siguientes acciones favorecen tu proceso de aprendizaje debido a que aportan algún nutriente o propician una condición que le permite un adecuado funcionamiento a tu cerebro y, por lo tanto, a tus funciones cognitivas.


Consume un litro de agua diario La hidratación permite que el oxígeno llegue a tu cerebro y realices los procesos mentales necesarios para aprender.


Consume frutas y vegetales Estos alimentos son fundamentales para tu alimentación porque contienen vitaminas y minerales.


Consume carbohidratos Estos alimentos son la principal fuente de energía para tu cerebro. Por ejemplo: quinua, arroz integral, fríjoles rojos, garbanzos, entre otros.


Haz ejercicio La actividad física aeróbica permite que las neuronas de tu cerebro se mantengan saludables y no mueran, por eso, sal a caminar o a trotar, monta en bicicleta o ve a nadar.


Realiza pausas activas durante el día Durante una jornada de estudio exigente, realiza pausas que estimulen tu creatividad y te ayuden a mantener la atención.


Mantén tu mente activa Esta actividad te ayuda a mejorar la capacidad de analizar y resolver problemas.
Actividades como sudokus, sopas de letras , laberintos, la lectura o tocar un instrumento musical te ayuda a mejorar la capacidad de analizar y resolver problemas.


Escucha una canción que te genere alegría Diversos estudios sustentan que las ondas sonoras producidas por la música estimulan la actividad neuronal, previenen el deterioro cerebral e influyen sobre la motivación y las emociones. (Lacárcel, 2003)


Duerme entre 7 y 8 horas diarias Un periodo de sueño reparador te mantiene despierto y alerta durante el día, haciendo que la información que recibes se almacene adecuadamente.


Toma una siesta de 20 minutos durante el día Este tiempo de descanso activa tu cuerpo y le permite un mejor rendimiento. Ten cuidado. Que la siesta no sea más larga porque podrías sentir mayor agotamiento y dificultades para dormir en la noche. (Moreno, 2009)


Dedica tiempo y atención a tus relaciones interpersonales Comparte con las demás personas para diversificar tus puntos de vista e intercambiar y construir conocimientos nuevos.



Acciones que afectan el proceso de aprendizaje:

Las siguientes son las acciones que afectan el adecuado funcionamiento de tu cerebro porque contienen sustancias y propician situaciones negativas que dificultan el proceso de aprendizaje. ¡Trata de evitarlas!




Evita consumir alimentos altos en grasas Este tipo de alimentos es difícil de digerir por su alto contenido en grasas. Por eso, al consumirlos nuestro cuerpo concentra la mayor cantidad de energía en los procesos gástricos, disminuyendo la energía destinada al proceso de aprendizaje.


No pases tiempos prolongados sin alimentarte El ayuno prolongado priva al cerebro de su principal fuente energética, reduciendo su capacidad.


Evita el consumo de energizantes y elevadas dosis de cafeína La cafeína es una sustancia que estimula el sistema nervioso central y puede ocultar la necesidad de sueño. Esto deriva en una disminución de los procesos cognitivos.


Evita consumo de sustancias psicoactivas Estas generan dependencia, las neuronas se acostumbran a ellas de tal manera que podrían llegar a centrar toda su atención en consumir más y más, impidiendo que la energía se concentre en los procesos necesarios para el aprendizaje. (Valencia, 2018)


Evalúa el impacto que tiene la música en tus hábitos de estudio La música es un estímulo que -para algunos- es un “activador” neuronal, sin embargo, para otras personas podría ser un distractor. Es importante que puedas identificar conscientemente qué efecto produce en ti.


Evita pasar tiempos prolongados jugando “videojuegos” Si bien algunos videojuegos podrían ejercitar habilidades relacionadas con la concentración, la coordinación y otras capacidades del pensamiento estratégico (Guerra, 2012); cuando no se controla el tiempo dedicado a esta actividad y se ve afectado el proceso académico, es adecuado reflexionar sobre sus efectos negativos y la importancia de poner límites.


Modera el tiempo que permaneces en redes sociales Estas te mantienen “conectado” con amigos y personas conocidas, pero te distraen constantemente. Reflexiona sobre el tiempo que inviertes en esta actividad y así, de manera equilibrada puedes disfrutar de ella sin afectar tu proceso de aprendizaje.


Cuida las horas de sueño diario El tiempo de sueño reparador recomendado para que un adulto joven logre mantenerse activo y alerta durante el día es entre 7 y 8 horas. Es importante que identifiques cuál es tu tiempo necesario y trates de administrar mejor las horas y las actividades del día, teniendo presente que menos de 7 horas de sueño afectará tu salud y tu concentración.